Durante los últimos 20 años, la Asociación de Promotores Musicales ha contribuido a consolidar la industria de la música en vivo en España. Y, sin lugar a dudas, quien ha colaborado para conseguir esta buena salud del sector ha sido el público. 20 personas cuentan sus anécdotas más inolvidables en festivales o conciertos.
María fue por primera vez a un concierto de La Oreja de Van Gogh en 2006, cuando estaban girando con Guapa. Recorrió muchísimos kilómetros por toda España durante esa gira organizada por Get In. Después de tocar en Almazán, el grupo quiso conocerla y a partir de ahí tuvo la posibilidad de compartir con ellos muchos más momentos.
Tiene muchas anécdotas, una de ellas, un fin de gira en el Palau Sant Jordi. María iba en avión y su vuelo fue cancelado, pero consiguió llegar yendo en taxi. Tanta es la conexión con el grupo, que cuando María realizó las prácticas del máster en Gestión de empresas de la Industria de la Música, acabó trabajando en Sony, la compañía discográfica de LOVG, y pudo colaborar mano a mano con ellos en la comunicación de Un viaje al mar muerto, Cometas por el cielo, Primera fila, El planeta imaginario. “Ni que decir lo gratificante que es poder poner al servicio de uno de tus grupos favoritos tu trabajo, conocimientos y energía.”
Después de 12 años trabajando en la industria, María comenta que “pocos como ellos son tan cercanos a sus fans. La relación con sus seguidores y lo cuidados que éstos se sienten por parte del grupo (al margen de la parte artística evidentemente) es la clave para que sean el grupo de cabecera de varias generaciones.
Este texto editado por Olga García ha sido originalmente publicado en el ‘Anuario de la música en vivo 2020 – Especial 20 Aniversario‘ de la Asociación de Promotores Musicales.